Mauricio Macri pasó un mal momento en la cena de la Fundación Libertad, donde confluyeron liberales y macristas. Al finalizar su curiosa alocución el presidente Milei, como no se quedaba a la cena, enfiló hacia la salida siendo abordado por todos los referentes empresarios y políticos que estaban en el lugar.
En el tránsito de Milei hacia la salida se cruzó con un conjunto de abrazos y saludos mientras que Macri a centímetros del mandatario era absolutamente ignorado. La imagen reflejó la cruda realidad del "despoder", el minuto después de dejar el cargo y la ausencia de "lapicera" para esos grupos de gran influencia.
Tras chequear su teléfono, Macri miró a su alrededor buscando una salida y en el cruce de su vista vio al ex presidente español José María Aznar y se aprontó a saludarlo para salir del cruce de las cámaras y evitar el papelón.
Mientras que las versiones sobre una alianza entre el PRO y La Libertad Avanza se enfría en lo formal, aunque el gobierno tiene muchos integrantes del PRO en sus filas como la propia Patricia Bullrich, el gesto de Milei y las espaldas de los invitados dieron a Macri una distancia de aquel referente que marcaba la agenda económica y política de la derecha local.
